lunes, mayo 22, 2006

brrr

Al doblar la esquina comencé a empaparme con el frío de la noche. Recuerdo haber prendido un cigarrillo y parapetarme debajo de la cornisa. No venía ningún colectivo y la noche se hacía más y más fría. De pronto de la nada, suena un estruendo grandioso... y una luz como de hielo se hace presente en el universo... y comienza primero suave y delicada, luego fuerte y poderosa la lluvia, y miro y huelo y me impregno... la observo sin respirar... el cigarro se ha apagado pero no importa... mis pensamientos volaron abstractos por segundos y el silencio se apoderó de mi boca durante esa noche...

No hay comentarios.: