No hay palabras, no existen
no se han inventado ni se inventarán
sólo se siente acá profundo, hundido
hiriente y suave...
se siente como una punzada tibia y dolorosa
y a la vez dulce y arrulladora
no hay palabras... no existen
cada una debería pasar por un millón de años de evolución cósmica
es primigenio y futurista
es como una ola en el mar
va y viene y vuelve a irse
y aún está presente cuando se pierde en el horizonte...
No hay palabras no existen
tendría que inventarse un lenguaje nuevo
tendrían que nacer de nuevo veinte generaciones de veinte razas de veinte subrazas
y aún así la palabra no existiría
y ese ser superior al verse ante el enigma sólo sonreiría y le diría mentalmente a su interlocutor
-No existen palabras ni siquiera en nuestro lenguaje mental

No hay palabras no existen
pero está aquí calientito esperando por mi mirada
esperando por una palabra que no existe
pero que vive y respira dentro de cada uno
dentro de mí, de tí, de él y de ella
que se anida en lo profundo de su pecho y vibra entero por cada una de las células y sus membranas tan difíciles de recordar
Tan vivo, tan exacto e inexacto
tan fugaz y tan eterno
que me hace suspirar y contentarme que mis treinta años son sólo segundos de mi verdadero tiempo
ese que no podemos calcular
No existen palabras, no existen
ni existirán...