Privadamente, observo los pliegues de mi cara
se pierden en trazos difusos
se esconden en mi carne y debajo de ella
observo, privadamente mi rostro y sus pliegues
casi 30
"almost thirty "
como diría un siutico trasnochado
y cuando el vendaval se desata
los pliegues no perdonan
se pliegan y repliegan
como las olas del mar
como el pecho de mi hijo
suben y bajan
arriba y abajo
da igual
cuando se desata un vendaval
la lluvia moja los pliegues y se vuelven duros o tersos
si es lluvia feliz se vuelven tersos
si es lluvia triste parecen peñascos a punto de caer al abismo
"almost thirty..."
y aún me tienen que ayudar a abrochar los cordones de mis zapatos...
2 comentarios:
Me dejaste turuleque. Es que, ya deberías escribir un librito de poemas. Pero en especial este poema me llegó hasta el tuétano, ya que igual estoy en las portas de los 30.
No te había respondido porque tuve que estudiar para una prueba, que supuestamente tendría el viernes, pero la han cambiado para el próximo martes. Así que te parece el miércoles a las dos de la tarde en la universidad y vamos a almorzar y hablar cosas entretenidas.
Si puedes dime, para enviarte mi celu a tu correo y nos veríamos el miércoles.
Saludos a su guaguita y a su hombre.
Vicente.
q lindo, es una edad q me atemoriza, pero cunado pienso sobre q lo q importa no son los años si no como los has vivido, relajo entonces mi mente y con alivio recompongo mi agrietada mirada.
UN abrazo.
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