Sonó la alarma de auto de nuevo, como cada tarde media hora aproximadamente, hasta que el dueño, un tipo gordo sonrojado, saliera apresurado como alguien a quien lo han pillado en alguna maldad... lo apagó después del tercer intento, como cada tarde... pero hoy no me sentía como todas las tardes... estaba triste... habían noticias que llegaban lejanas, que habían viajado de boca en boca, rodando, mutando, cambiando, y que finalmente llegaban a mis oídos. Me había ganado un premio y yo no lo sabía, mi nombre figuraba en grandes paneles y yo no lo sabía, se habían mandado a imprimir catálogos y programas, y yo no sabía... no lo sabía hasta que la boca se posó en mi oído y susurró mi nombre... no sabía cuan importante era hasta que se me informó casi al pasar, casi inadvertidamente del cheque.... Si hubiesen querido sorprenderme a conciencia, no lo habrían conseguido de mejor forma... Era la invitada principal y no lo sabía... no lo supe sino hasta el día siguiente que la ceremonia se había hecho, había ido otra en mi representación, con otra cara, con otra voz, pero para ellos que tampoco sabían quien era yo, era "yo"... irrefutablemente, habían dicho "que garbo, que sonrisa, que ojos, que pelo.. se lo merecía... ella era la ganadora indiscutida..." "su trabajo fue maravilloso..." le dijeron los curiosos invitados a ella que era "yo", "su prosa deliciosa..." y ella que no era "yo" no sabía que decir y sólo sonreía deliciosamente..."gracias gracias... mil gracias..." Si hubiese sido yo por último habría exclamado... "gracias fue una sorpresa.. nunca pensé ganar este concurso, pero agradezco al jurado el haberme adjudicado tan grande honor" y hubiese hecho una reverencia graciosa, sonreído (obviamente)... pero nunca "yo" había estado tan escueta.. gracias gracias mil gracias??? que es eso???... parece el saludo monosílabo de una miss de belleza... en fin... nunca lo supe en su momento, quizás a esa hora estaba cortándome las uñas así de lo más normal y si no me hubiesen sorprendido con esa llamada y con el cheque (que llegaría en una semana), y que tenía un jugoso descuento por no asistir a mi ceremonia de premiación y al tener que pagarle a "yo" para que asistiera, hubiese sido más suculenta la sorpresa...pero bueno, pensé ..por un lado... no hubiese tenido ropa apropiada... digo yo... kizás tampoco zapatos...